Martes 8 de diciembre de 2020
A partir del 21 de diciembre, coincidiendo con el solsticio de invierno, se producirá un fenómeno astronómico que sucede en contadas ocasiones.
La conjunción de Júpiter y Saturno provocará un resplandor similar al que dio origen al astro que, para los cristianos anunció, el nacimiento de Jesús.
Según señaló Patrick Hartigan, astrónomo de la Universidad Rice, en una entrevista con la revista Forbes: "Las alineaciones entre estos dos planetas son bastante raras, ocurren una vez cada 20 años aproximadamente, pero esta conjunción es excepcionalmente rara debido a lo cerca que parecerán estar los planetas entre sí".
"Tendría que retroceder hasta justo antes del amanecer del 4 de marzo de 1226, para ver una alineación más cercana entre estos objetos visibles en el cielo nocturno", añadió. Los avistamientos se podrán observar toda una semana después de la puesta de Sol el 21 de diciembre, según se informó. ¿Qué se verá? Algo así como si fuera un planeta doble, pero en realidad es solo que los planetas estarán muy cerca uno del otro.
¿Por qué se lo asocia a la Estrella de Belén? Porque el mítico astrónomo Johannes Kepler que vivió entre 1571 y 1630, llegó a la conclusión de que aquel fenómeno al que la Biblia hace referencia no fue realmente una estrella, sino una de las múltiples conjunciones entre Júpiter y Saturno sucedidas en el siglo VII. El matemático aseguraba que la cercanía entre ambos planetas (desde el punto de vista terrestre) fue el fenómeno que dio origen al mito.