Domingo 6 de marzo de 2016
Una auditoría encargada por la Gobernadora María Eugenia Vidal arrojó que en Buenos Aires hay contaminación, desbordes cloacales y cañerías con más de 100 años que no fueron reemplazadas por ABSA, entre otros problemas. Nueve de Julio aún sigue esperando el funcionamiento de la planta potabilizadora.
Salinización, presencia de arsénico, falta de redes y nitratos, presencia de hierro y magnesio y desertificación son algunas de las problemáticas que conforman las secciones del documento que recibió Vidal.
De acuerdo a un extracto de la auditoría, hay falta de mantenimiento en las 18 plantas potabilizadoras.
En cuanto a las 77 plantas depuradoras cloacales, el informe alerta: "Hay un gasto extraordinario por rotura de bombas, andamiajes en deterioro y mayor consumo de potabilizantes".
Las cañerías también fueron objeto de estudio, y el documento también arrojó un panorama preocupante: hay más de 40 mil reclamos irresueltos por "baja presión, pérdidas y conexiones irregulares". Puntualmente en La Plata, se destaca que hay cañerías que tienen 100 años pero ABSA no las reemplazó.
Por último, otro problema es el de los desbordes cloacales, con sus consecuencias ambientales y en la salud: "Los desbordes se reiteran en toda la concesión", indica el estudio.
Y ASI NACE
La empresa estatal ABSA, que presta servicios en 91 localidades de la Provincia., fue creada en 2002 y le otorgó el contrato de concesión a la empresa francesa Azurix. Tiene 2.293 empleados para cubrir 50 mil kilómetros cuadrados y 3,7 millones personas.
Entre las principales irregularidades se detectó falta de inversiones a largo plazo, un déficit operativo superior a los $ 1.000 millones anuales y plantas potabilizadoras con sesenta años de antigüedad, cuadrillas desmanteladas o cañerías con más de cien años de uso.
De las 11 regiones en las que está dividida la empresa, el informe las separó por problemas: salinización, presencia de arsénico, falta de redes y nitratos, presencia de hierro y manganeso y desertificación.
DE ESTO SABE NUEVE DE JULIO
En nuestra ciudad, podría decirse que ya paso mucha agua debajo del puente. El Partido sigue con altos índices de arsénico en agua. Pese a las promesas de campaña, todavía no fue inaugurada la planta potabilizadora.
Su finalización estaba prevista para septiembre de 2015, pero circunstancias operativas provocaron demoras.
En el archivo de INFONUEVE.COM la referente de la ONG “9 de Julio, Todos por el Agua”, Julia Crespo, aseguraba en septiembre de 2015: “Estimamos que habiendo comenzado hoy las pruebas de funcionamiento en el término de días finalizarán las obras”.
En fecha simultánea, el Ing Luis Volpi, gerente de Operaciones de ABSA, afirmaba ante la prensa nuevejuliense: “Este verano Nueve de Julio estará recibiendo agua de la planta potabilizadora”.
El tema es que nuestra ciudad va cursando el tercer mes de 2016 y aún las aguas del grifo siguen con arsénico.
La inversión total de la Pcia de Bs As (entre las solventadas por Absa y por la Dipac) en obras de agua potable para Nueve de Julio excederían los 50 millones de pesos.
Lo cierto es que en nuestra ciudad se está trabajando en la planta potabilizadora desde el año 2012, cuando se anunció su ejecución. Todo gracias al Acta Acuerdo firmado en la Defensoría del Pueblo de la provincia el 30 de mayo de 2011, logro del grupo “9 de Julio, Todos por el Agua.
En un comienzo, se comprometieron a realizar una serie de obras que incluían la cisterna, el anillado hídrico y los pozos nuevos. Al año siguiente, cuando se comprobó que esas obras no solucionarían definitivamente el problema, comenzaron con la construcción de la planta.
Cabe recordar que en la ciudad, el despertar masivo al problema del agua con arsénico y sobre todo la presión social se ejerció a partir de la creación de la ONG “9 de julio, Todos por el agua”, un grupo que se gestó a través de facebook en septiembre de 2010.
Hasta entonces, las denuncias y las preocupaciones sobre el tema eran esporádicas o asomaban tímidamente en las agendas públicas y mediáticas. “El grupo nació cuando vecinos preocupados comenzamos a buscar la solución ante la inacción de las autoridades- recordaba Crespo por aquel entonces y quien actualmente es concejal del FPV.
Finalmente y más allá de las promesas de campaña, lo que sí podría afirmarse es que la ONG “9 de Julio, Todos por el Agua” acentuó un precedente tanto en la historia de la provincia y como de ABSA. Demostró como la unión de los vecinos hace la fuerza y que es obligación de quienes gobiernan cumplir con el derecho fundamental que tiene todo ser humano: el acceso al agua potable.
