Sábado 23 de agosto de 2025
Este evento lunar poco frecuente se dará en el cielo este sábado 23 y ya genera curiosidad en todo el mundo.
La Luna negra tendrá lugar este sábado 23 de agosto, y aunque no será visible a simple vista —ya que la fase de Luna nueva oscurece su superficie— sí tendrá un fuerte simbolismo cultural y espiritual.
En la astrología, la Luna negra está vinculada con los inicios y los cierres de ciclo. Se la asocia con momentos de introspección y renovación personal.
Para quienes siguen los fenómenos astronómicos, representa una oportunidad especial de conexión y de reflexión en torno a los nuevos proyectos.
Qué es la Luna Negra
La Luna Negra es un tipo específico de Luna Nueva y está relacionada con un desfase en el ciclo lunar. El mes lunar tiene 29,53 días, período comprendido entre dos momentos en que la luna se halla exactamente en la misma fase, de luna nueva a luna nueva tras pasar todas sus fases. Es lo que en Astronomía se conoce como mes sinódico.
Si habitualmente cada estación tiene tres lunas nuevas, el invierno de 2025 cuenta con cuatro. A la tercera de ellas se le da el nombre popular de Luna Negra estacional. En concreto, la tercera luna nueva tiene lugar el sábado 23 de agosto bajo la constelación de Virgo.
Luna Negra, un momento para reflexionar
Más allá de lo estrictamente científico, muchos atribuyen ciertas características a la Luna Negra. Aseguran que este fenómeno genera un momento particular, donde se sugiere mirar hacia adentro y evaluar los aspectos de la vida que necesitan cambio.
Se presenta, entonces, como un período ideal para dejar atrás hábitos, pensamientos o relaciones que ya no aportan. Expertos en astrología y bienestar coinciden en que la energía de la Luna Negra favorece la liberación de cargas emocionales y la preparación para nuevos comienzos.
Algunas prácticas recomendadas en esta fase:
Meditación profunda: dedicar unos minutos a la respiración consciente ayuda a conectar con las emociones y a liberar tensión.
Escritura reflexiva: anotar aquello que se desea soltar o transformar permite clarificar objetivos y sentimientos.
Rituales simbólicos: encender velas, preparar un baño purificador o realizar pequeños actos de limpieza personal y del hogar puede potenciar la sensación de renovación.