No tan feliz Día del Periodista

La profesora de Taller de Expresion I pregunta “¿por qué estudian Comunicación Social?”. La alumna responde con sonrisa inocente “me dijeron que el periodismo tiene mucha salida laboral”. La alumna descubrirá que le dijeron mal, que desde el 10 de diciembre hubieron 2 mil despidos en el sector según datos del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SIPreBA), que algunos de los diarios más importantes del mundo como el New York Times anuncian recortes personal año tras año, que el periodismo literario “rodolfowalshista” fue reemplazado por la producción fordista en masa de noticias para ganarle a la velocidad apremiante que imprime el timeline de Twitter.

Los periodistas Eduardo Aliverti, Sergio Elguezabal y Fernando “Tato” Dondero, representantes de la trilogía televisión-radio-gráfica, analizan la actualidad del periodismo, los sindicatos de prensa y la posibilidad de una colegiatura.

Sergio Elguezábal, nativo de Bragado, es el principal especialista en ecología del país. Durante 26 años trabajó en Canal 13, donde condujo TN Ecología y participó en Telenoche Investiga; hoy conduce Sábado Verde en Radio Ciudad. Elguezábal afirmó que el periodismo está pasando por un momento de cambio: “Estamos terminando de reemplazar un viejo paradigma para entrar en una etapa siguiente. Pero los grandes medios de comunicación y los periodistas no muestran avanzar a la misma velocidad.”

Por su parte, Eduardo Aliverti, gloria de la radio argentina, docente de Radio en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y director de la escuela de comunicación ETER habló del resultado del enfrentamiento de los gobiernos kirchneristas con ciertos medios:

-Lo que provocó el kirchnerismo es que sinceró el debate acerca del papel que juegan los medios, que los medios tienen sus intereses, sus ideologías, sus presiones y sobre todo: sus negocios. De eso ya no hubo retorno y es muy positivo porque se acabó el cuento del periodismo independiente y el romanticismo en torno a que el periodista puede jugar un rol ajeno a lo que son los factores de presión ideológicos, comerciales, corporativos. Esa es la parte buena. Lo negativo es que en tanto y en cuanto se consolidó el ejercicio de la actividad periodística como un factor de negocios políticos, se perdió mucha calidad en el periodismo argentino, sobre todo en los medios audiovisuales que entraron en una lógica muy televisiva, de cultura clip, de todo pasa. Se ha perdido profundidad, también en la radio y en el periodismo gráfico.

Fernando “Tato” Dondero escribe en Página/12 y es Secretario General de SIPreBA. Con más de 30 años de profesión y algunos menos de sindicalismo, ofrece una visión de experiencia y lucha gremial: “Es el peor momento para los trabajadores de prensa que yo recuerde en 30 años de periodismo. Hubo momento graves durante el menemismo, pero la situación actual es la peor. Además los grandes medios marcan la pauta de qué se puede y qué se debe decir y el trabajador de prensa encuentra su rol limitado a eso. Hay una censura directa o indirecta que hace que lo que debería ser un trabajo absolutamente democrático e independiente de libertad de expresión no lo sea”.

En este marco, los sindicatos de prensa tienen el deber de defender los puestos de trabajo y el salario.

Dondero señaló que “muchas veces el periodista se queda con el rol que cumple, hay cierto vedettismo en ciertos casos como el de la televisión y se pierde el eje que tiene que tener como trabajador en cuanto a la defensa de sus estatutos y sus convenios.”

Acerca del rol de los sindicatos, Elguezábal dijo que “como todo el sindicalismo argentino, los sindicatos de prensa se han quedado en el tiempo. No están en la mesa debatiendo acerca de la modernización y el avance de la profesión sino que se quedan discutiendo temas sectoriales. Un sindicato único de prensa con una visión más a futuro sin duda serviría como elemento de transformación.”

Hace décadas se debate la posibilidad de una colegiatura del periodismo. Arquitectos, médicos, abogados y locutores tienen sus colegios que regulan la práctica de la profesión. Hace años los periodistas piden por la apertura de este debate que todavía no comenzó:

-No creo que se vaya a dar, aunque me parecería interesante que se dé -opina Aliverti-. Los intereses son demasiado fuertes, sobre todo por parte de las empresas pero también dentro del propio gremio para que no haya una instancia de ese tipo. Sería un debate interesante pero los intereses en juego no lo permitirían.

-Yo le daría la bienvenida -marcó Elguezábal-. Tengo 30 años de carrera en periodismo y desde que comencé se habla de una posible colegiatura y ya había redactores en contra, colegas a favor. El debate sigue hasta nuestros días y seguirá. Si sirve para favorecer la práctica ética yo estaré a favor, la libertad por la que tanto claman algunos periodistas sirvió para que unos pocos hagan negocios. Al fin y al cabo todos nos debemos a la opinión pública.

Pero al parecer los gremios no piensan acompañar esta iniciativa modernizadora, Dondero dijo que no se lo plantean y su gremio se concentra en las mejoras salariales. Además advirtió: “Cuidado con la modernización de la profesión, nosotros no estamos en contra de las nuevas tecnologías pero sí cuando son excusa para la flexibilización laboral”.