Miércoles 5 de enero de 2022
Mientras tanto, en la Argentina se redujeron los tiempos de cuarentena, en una decisión que emanó del Consejo Federal de Salud ante el repunte de casos de diciembre.
Mientras que en la Organización Mundial de la Salud (OMS) mantienen su idea de que se debe alcanzar al menos 70% de la población vacunada a nivel mundial antes que aplicar las dosis de refuerzo, el doctor del staff del organismo Abdi Mahamud alertó sobre los tiempos de aislamiento y, al respecto, sostuvo la recomendación de que las cuarentenas sean por 14 días.
Pese a que el médico detalló que en la mayoría de las personas el Covid-19 desaparece entre cinco y siete días después de los primeros síntomas, insistió con las dos semanas de encierro para evitar propagar la enfermedad.
Esto va en contra de lo decidido en la Argentina la semana pasada, ante el repunte de casos de coronavirus de diciembre que marcó el comienzo de la tercera ola en el país. La ministra de Salud, Carla Vizzotti, fue la que transmitió que en el Consejo Federal de Salud (Cofesa) -con representantes de todas las provincias- habían decidido estrechar los plazos de aislamiento a cinco días para contactos estrechos vacunados con esquema completo y a siete para contagiados que estén con la inoculación primaria lista.
Sin embargo, el aviso de Mahamud no fue tajante, ya que reparó en que los gobiernos de cada país deben decidir en base al avance de la pandemia en sus territorios. “Los Estados tienen que tomar decisiones sobre la duración de la cuarentena en función de su situación individual. Es lógico mantener el número de casos lo más bajo posible en los lugares en los que estos ya son escasos, pero en los sitios donde se registran muchos hay intereses contrapuestos, como el de mantener el funcionamiento de los países, que podrían justificar cuarentenas más cortas”, deslizó.
Dentro de las naciones que recortaron los períodos de aislamiento también se encuentra Estados Unidos, que lo hizo para acelerar el regreso de las personas al trabajo o a la escuela.
La prioridad de que se vacune 70% de la población de cada país
En lo que sí fue enfático Mahamud es en la necesidad de universalizar el acceso a las dosis contra el Covid-19. “El reto no ha sido la vacuna en sí misma, sino la vacunación de las poblaciones más vulnerables”, remarcó el médico, quien advirtió por la multiplicación del virus “en entornos hacinados, no ventilados y sin vacunas” y que describió a estos lugares como “ideales” para propiciar las mutaciones. “Ya lo vimos con beta, lo vemos con delta y lo observamos con ómicron”, refirió.
En ese sentido, indicó que la mejor manera de reducir el impacto de esta última variante detectada, e identificada por primera vez en Sudáfrica, es que todos los países vacunen al 70% de la población para julio, antes que ofrecer terceras y cuartas dosis en los demás.
Precisó, además, que antes de las fiestas de Navidad unos 128 países ya habían notificado casos de ómicron. “Lo que estamos viendo ahora es el desacople entre los casos y las muertes”, dijo, sobre el efecto positivo de las dosis contra el Covid-19.
Por otra parte, el epidemiólogo señaló que cada vez más estudios demuestran que esta variación afectaría a las vías respiratorias altas, con síntomas más leves que otras, que accedían a los pulmones y podían causar neumonías graves. No obstante, aclaró que es necesario que se mantengan las investigaciones para demostrar efectivamente que la enfermedad con ómicron es menos agresiva.
“Así que el mensaje principal es: si te vacunas, estás protegido. Pero si sos una persona en situación de vulnerabilidad o no te vacunaste, ómicron, por muy leve que sea para los demás, podría afectarte gravemente”, destacó el representante de la OMS, que concluyó: “La vacunación es fundamental”.
LN.
