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Sunday 22 de May de 2016

Buenos Aires bebió en la Semana de la Coctelería

BACoctel presentó la segunda edición de la Semana de Coctelería de Buenos Aires que cerró ayer con un evento auspiciado por Jägermeister en el recién inaugurado BrukBar de Palermo. El evento semanal albergó a más de 40 bares y 30 encuentros entre el domingo 15 y ayer.

El reloj marca las 20 en el mítico 878, el primer speakeasy (bar escondido, réplica de los bares estadounidenses durante la prohibición del alcohol) de la capital. Un bartender, dos filósofos y una socióloga se presentan y durante dos horas analizan el poder de la metáfora en el arte gastronómico. Hace tiempo que la coctelería es algo más que mezclar líquidos y hacer un trago rico.


Según Carina Perticone, semióloga e investigadora de la UBA, hay tres mitos en torno al gusto: El concepto de “buen” gusto, la categoría de experto y el lenguaje correcto a la hora de hablar de beber.


La voluptuosidad del lenguaje de los catadores y sommeliers empieza a ser cuestionada y ya circulan por Internet catas irónicas de gaseosas colas de segunda marca, salchichas de menos de 10 pesos y hasta papeles higiénicos baratos.


La coctelería antes pensada como un gusto de las clases altas y de los snobs se abre paso a los gustos más populares. La Semana de la Coctelería, con cocteles de calidad a 50 pesos, es una muestra del crecimiento del sector en los últimos años.


Los argentinos tenemos una importante historia en esta rama de la gastronomía. Desde la década del 40 con Pichín Policastro, “el barman de Perón”, hasta la actualidad donde Florería Atlántico fue elegido el mejor bar de América Latina por la revista Drinks International.